Se comprometen católicos laicos a la transformación de Mexico
¿Cómo es posible que, siendo México una nación de mayoría católica, los políticos católicos brillen por su ausencia?
Durante su visita al 2° Encuentro Nacional Juntos por México, realizado en la ciudad de Querétaro, el Nuncio apostólico en México, Franco Coppola, mostró su extrañeza de que México, siendo un país tan católico, tenga “una presencia muy escasa de católicos” a nivel político, a tal grado que casi no se vea su presencia.
Coppola manifestó su deseo por fortalecer la presencia cristiana en la sociedad mexicana y, especialmente, en la vida política del país.
Después de tres jornadas de trabajo, llevadas a cabo del 6 al 8 de octubre, donde participaron cerca de 5 mil personas provenientes de 90 diócesis de toda la República, el 2° Encuentro Nacional Juntos por México pareció responder a la inquietud expresada por el Nuncio apostólico, pues dicho evento corroboró la fuerza y la autoridad que tienen los laicos católicos en la construcción de una sociedad sana, tanto por los diversos servicios que ofrecen a las familias mexicanas, como por su compromiso de brindar esperanza al futuro nacional.
Al final de los trabajos del 2° Encuentro Nacional Juntos por México, el movimiento nacional de laicos refrendó la urgencia de seguir trabajando unido en una “Iglesia en salida” para la construcción de un México más sólido en sus valores sociales, más unido en su diversidad cultural y un país decididamente a favor de la persona.
Al presentar el Manifiesto por México, la Coordinación Nacional de Juntos Por México anunció compromisos y acciones en siete rubros: Bien Común; Destino universal de los bienes; Defensa de la Vida y Familia; Participación en Política y Dialogo; Solidaridad y Voluntariado; Verdad, Libertad, Igualdad y Amor; y Juventud.
Con una manta de 20 metros de largo colocada a los pies de la Virgen María, los laicos católicos firmaron su adhesión al Manifiesto final.
“Los laicos son la esperanza de México”: Obispo Armendáriz
México vive una “etapa coyuntural” de la historia donde la familia sufre una de las peores persecuciones ideológicas, advirtió el Obispo de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, en la clausura del 2o Encuentro Nacional Juntos por México.
En su calidad de presidente de la Dimensión Episcopal de Laicos de la CEM, Monseñor Faustino Armendáriz fue el anfitrión del evento al que concurrieron integrantes y representantes de las 90 agrupaciones de laicos a nivel nacional.
En su mensaje, llamó a todos los bautizados de la Iglesia Católica a cuidar y fortalecer los valores que fundan la familia y que la sostienen como institución.
“Nuestra misión como laicos es que cultivemos los valores de la vida desde la concepción hasta la muerte natural, la familia, el matrimonio entre un hombre y una mujer, la paz, la libertad religiosa, la verdad y, sobre todo, la fe”, dijo.
Durante la homilía, el obispo advirtió que el debilitamiento de la fe y de la práctica religiosa en algunas sociedades afecta a la familia y la deja más sola en sus dificultades.
El prelado hizo un llamado para que millones de militantes de los distintos movimientos y asociaciones laicales constituyan un anhelo de esperanza para México porque la familia no es una institución pasada de moda y no ha perdido su misión.
Expresó que actos como el de Juntos por México son útiles para que desde la misión, que cada uno de los laicos realiza en su movimiento o asociación, contribuya para cultivar y guardar mejor la viña del Señor.
Llama el Nuncio a reconstruir el tejido social de México desde la familia
Por su parte, el Nuncio apostólico en México, Franco Coppola, advirtió la urgente necesidad de construir en México un nuevo tejido social a través de la fuerza de la familia, porque de lo contrario se corre el riesgo de romper este núcleo y terminar en situaciones de emergencia como se vive hoy en países de Europa y África.
“Si no nos comprometemos a construir este tejido social con la fuerza de la familia, vamos a terminar en esa situación”, afirmó. “Es tiempo de crear familias donde nadie se sienta excluido”, dijo.
En este marco, el Nuncio apostólico leyó un mensaje del Papa Francisco, en el que expresa sus deseos por que la sociedad mexicana “se trasforme en una auténtica familia donde nadie se sienta excluido y todos puedan experimentar en su vida la ternura y la cercanía de Dios”.
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